Black Friday

El término Black Friday apareció por primera vez en la década los 60 en Estados Unidos para designar el viernes inmediatamente después del Día de Acción de Gracia, el cuarto jueves de noviembre: un día en que los americanos acuden en masa a las tiendas para hacer sus compras navideñas. Tiempo después, esta expresión fue retomada por un gran número de grandes marcas a nivel internacional.

En Estados Unidos, el Black Friday es tan importante que algunos empleadores dan un día libre a sus empleados. Cuando este no es el caso, los americanos generalmente se toman el día libre para no perderse el evento.

Según la leyenda, los comerciantes que hacían sus cuentas a mano usaban tinta roja durante los períodos de déficit y negra cuando las cuentas tenían superávit. Se dice que durante todo el año las cuentas eran generalmente deficitarias salvo este famoso viernes, día en que los negocios se volvían rentables. Es precisamente por eso que hablamos de “viernes negro” o Black Friday.

Si el Black Friday europeo sigue siendo mínimo en comparación con Estados Unidos es porque apareció en Europa a partir de 2014. Desde entonces goza de una creciente popularidad en España. Cada vez más marcas españolas participan en el Black Friday ofreciendo promociones en su sitio web o directamente en la tienda. En 2015, los españoles gastaron más de 120 millones de euros en este día tan esperado.

Si durante la época de navidad los pequeños comerciantes alcancen su facturación más alta del año, el Black Friday les perjudica enormemente, viendo como merma sus ya pequeños márgenes.

Más que nunca este año, ¡los comerciantes necesitan un gran apoyo. No solamente por la subida de precio de luz, combustible, costes diversos sino por todo lo vivido estos últimos años! La Navidad y los Reyes, para la mayoría de ellos, es el período en el que alcanzan la mayor facturación y la posibilidad de mantener sus negocios el resto del año.

Boicotear el Black Friday permite a las empresas vender sus artículos al precio de venta correcto, para que puedan vivir y apoyar a sus proveedores adecuadamente.

Debemos entre todos luchar contra las falsas promociones y los descuentos indecentes

Boicotear el Black Friday significa boicotear prácticas comerciales límites o incluso contraproducentes. Aunque el precio de referencia es (normalmente) el precio base de los artículos que encontrarás durante estas mega rebajas, algunos no dudan en inflarlos.

¿De verdad cree que es viable que los comerciantes vendan sus productos al -50 %, al -70 % o incluso al -90 %? Es usted INGENUO. Antes de llegar a sus manos, tiene que pagar a tanta gente que algunos precios parecen indecentes.

Por eso creo que debemos boicotear estas operaciones comerciales del Black Friday  tontas y perjudiciales para todos nosotros.

Permítanme preguntarles cómo se sentiría si como empleado, su empleador el diría que los Black Friday, usted trabajaría por la mitad de precio ¿?

Como empresario, como se sentiría si todos sus clientes les pidiera rebajar sus precios de sus servicios y productos estos días porque Amazon y las grandes empresas globalistas lo hacen?

En TuRopaDeCaza, no hacemos ni BlackFriday, ni Green Monday ni tampoco Pink Wensday. Desde hace más de 15 años tratamos de prestarles el mejor servicio y atención.

Nosotros basamos nuestro negocio en añadir valor y no en quitarlo.

Si quiere beneficiarse de unos descuentos especiales, ponemos a su disposición este enlace dedicado a Ofertas especiales en tallas y productos específicos.

Estos descuentos se deben a que hemos mantenido el precio del año pasado en ciertos productos y tallas, o bien porque se refiere a productos descatalogados o devoluciones de prendas de clientes por cambio de talla.

Entre todos nosotros con prácticas honestas y coherentes, podremos reconstruir un mundo mejor.

Les deseamos una buena caza.